ACTUALIDAD Y CONSEJOS DE SALUD
Las cataratas en los ojos son una consecuencia natural del envejecimiento del ojo y se producen cuando el cristalino se va volviendo opaco, lo que dificulta la visión.
El cristalino es una lente natural del ojo, tiene un tamaño similar a una lenteja y es el encargado de enfocar para que podamos ver con nitidez. A medida que vamos cumpliendo años, el cristalino va perdiendo transparencia y flexibilidad, lo que repercute negativamente en la visión, puesto que el ojo empieza a tener problemas para enfocar.
Las cataratas aparecen normalmente en torno a los 55-60 años. Pero existen casos de pacientes diagnosticados de cataratas a los 50 años, dependiendo de la saud visual del paciente. Teniendo en cuenta el aumento de la esperanza de vida de la población en España, las cataratas son un problema que cada vez se ve más en las consultas de Oftalmología.
Según va perdiendo opacidad el cristalino, podemos empezar a tener estos síntomas de cataratas:
Las cataratas en los ojos se forman poco a poco, conforme el cristalino se va volviendo opaco en diferentes partes. Normalmente, una persona nota que no ve bien cuando la opacidad se localiza en la parte central del cristalino o es muy densa. Por eso, a partir de cierta edad es aconsejable acudir regularmente a revisión con el oftalmólogo para que pueda detectar de forma precoz la opacidad del cristalino y siga su evolución.
El diagnóstico de las cataratas se hace mediante la exploración del ojo, previamente dilatado, con una lámpara de hendidura. Con esta herramienta, el oftalmólogo puede ver exactamente donde está localizada la catarata y el grado de opacidad del cristalino. Además con la dilatación de pupilas se puede comprobar que no existe ninguna causa en nuestro fondo de ojo que justifique la pérdida de visión.
El único tratamiento posible para las cataratas es la cirugía. Nuestros profesionales recomiendan llevar a cabo la intervención cuando el problema de visión implique una pérdida de calidad de vida e impida realizar las actividades de la vida diaria.
Para la operación de cataratas se emplea el láser de femtosegundo de gran precisión y se utilizan ultrasonidos para retirar los fragmentos del cristalino opaco. Una vez retirado, se introduce una lente intraocular que puede resolver los problemas de refracción que se tengan.
En los Servicios de Oftalmología de los Hospitales de Sanitas contamos con un equipo de especialistas con amplia experiencia en cataratas y con la última tecnología para el diagnóstico y tratamiento de este problema de visión.
La operación de cataratas es ambulatoria, no necesitas ingreso hospitalario, y la recuperación es corta, pero ten en cuenta que el día de la operación no debes hacer esfuerzos, fijar la vista, coger peso, bajar la cabeza y no debes venir conduciendo tu coche… Sigue las indicaciones de tu médico y pregunta cualquier duda.
En los días posteriores a la intervención se recomienda no practicar deportes de impacto, maquillarse los ojos o lavarse la cabeza.
Recuerda que la cirugía de las cataratas permite olvidarte de las gafas para casi el 90% de las actividades cotidianas si también se utilizan lentes correctoras de la presbicia
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