ACTUALIDAD Y CONSEJOS DE SALUD
A veces, con los cambios de luz podemos ver una especie de moscas volantes que giran alrededor de nuestros ojos. No, no estamos sufriendo alucinaciones; se trata de unas condensaciones que se producen dentro del ojo, concretamente en el gel vítreo, que es el líquido que llena el interior del ojo, lo que hace parecer que tenemos moscas en la vista.
En los meses de más luz, sobre todo en verano, es más frecuente que veamos moscas volantes porque las condensaciones que tienen lugar en el gel vítreo o humor vítreo producen unas sombras en la retina que nuestro ojo ve como manchas negras que recuerdan a las moscas.
El término médico que emplean los especialistas para referirse a las moscas volantes es miodesopsias.
Si ves moscas volantes, aunque no sea con mucha frecuencia, es mejor que consultes con un especialista. En el Servicio de Oftalmología de los Hospitales de Sanitas contamos con un equipo de profesionales con amplia experiencia en la valoración de la patología ocular que pueden ayudarte a despejar dudas como:
Entre las causas relacionadas con ver moscas volantes en los ojos están:
El motivo de consulta no te debe alarmar, pero sí que es conveniente que acudas al oftalmólogo para que pueda descartar problemas mayores. Para esto, el especialista hará un examen exhaustivo del ojo. Mediante unas gotas de dilatación ocular, te dilatará la pupila para poder analizar con detenimiento el vítreo, que se puede desprender, generar un desgarro o un agüero en la retina que requiera un tratamiento para prevenir el futuro desprendimiento de retina. Por eso, a veces, las moscas volantes pueden dar una pista sobre un posible desprendimiento de retina, sobre todo cuando se acompañan de pequeños destellos de luz.
Para el tratamiento de las moscas flotantes, en el caso de que en la consulta tu oftalmólogo constate la presencia de un desgarro dentro de la retina, puede solucionar el problema mediante fotocoagulación utilizando un láser argón.
Este láser de luz verde produce pequeñas quemaduras en la retina con el objetivo de que quede sellado el desgarro y así se puede prevenir que se produzca a corto plazo un desprendimiento de retina.
Si te hacen una fotocoagulación, debes seguir las siguientes recomendaciones:
Tras la fotocoagulación, además de tener la visión alterada, puedes ver algunas luces durante la noche, que se llaman fotopsias. También puedes sentir alguna molestia, ya que se libera energía dentro del ojo. En ocasiones, para administrar el láser hay que apoyar una lente en el ojo y eso puede producir cierta incomodidad. Pero no te preocupes, esa sensación de cuerpo extraño se puede tratar con lágrimas artificiales o colirios antiinflamatorios.
Cuando pasen una o dos semanas, deberás acudir a la consulta del oftalmólogo para que se asegure de que el láser ha cicatrizado y ha sellado bien la retina. De esta forma, te olvidarás de las moscas volantes en los ojos.
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